Lo único seguro por el momento es que el partido ante Colón será pasado mañana en el Gigante de Arroyito y a puertas cerradas. Diego Cocca aún tiene margen como para seguir probando y analizando las variables que tiene a mano en pos de encontrar los once apellidos para el desafío inaugural de la Copa Superliga. Aunque todo parece indicar que el entrenador canalla tiene pensando realizar dos variantes en relación a la derrota que viene de sufrir en La Paternal ante Argentinos. Y serían los ingresos de Lucas Gamba y de Diego Zabala por el lesionado Federico Martínez y Emmanuel Ojeda, respectivamente.
Los auriazules se moverán nuevamente con la mente bien puesta en el sabalero. La meta es aceitar el funcionamiento colectivo, que prácticamente cada vez que salió de los límites de Arroyito puso la mejilla.
Sin embargo, Diego Cocca confía en encontrar el norte en esta nueva competencia que arrancó anoche, donde Central buscará además seguir acopiando puntos para olvidarse del descenso y sacar boleto a una copa internacional.
Todavía falta hacer dos trabajos de campo. Pero la lógica indica que el factible equipo para el lunes estaría integrado por Jeremías Ledesma; Martínez, Laso, Novaretti y Brítez; Zabala, Rinaudo, Pereyra; Rius, Marco Ruben y Gamba.
Por otra parte, Gino Infantino firmó ayer el primer contrato profesional. El juvenil es una de las máximas promesas que tiene el club a corto plazo. Mientras suma minutos en la reserva, el pibe tratará de tener la chance de mostrarse en el circo grande en este semestre.
En tanto, anoche se conoció la sanción al entrenador centralista por la expulsión sufrida ante Argentinos. “Se suspende por 1 partido o se le multa en valor de 23 entradas, al DT Diego Cocca, artículos 186 y 260/1 del R.D (protestar fallos)”, reza el comunicado emitido por el tribunal de disciplina. Como el club pagó los 16.100 pesos de multa, el entrenador podrá estar en el banco auriazulel lunes a la noche ante Colón.
Cuando Central inició la temporada lo hizo con un trazo rojo que le atravesaba todo el lomo y con el peso de los temores propios de la situación que le tocaba vivir. Hoy la cosa es distinta. No hay margen para la relajación pero las urgencias ya no son tales. Hay un cierto alivio.
En aquel momento era prácticamente un mano a mano con Gimnasia, Newell’s, Patronato y algunos equipos más, dependiendo además de lo que ocurriera con los recientemente ascendidos como Central Córdoba y Arsenal. Pararse hoy frente a esa “tabla del miedo” amerita reconocer que gran parte de la labor fue cumplida. Podría hablarse también de cuáles fueron los caminos futbolísticos utilizados, pero ese es un terreno de mucha mayor subjetividad, más allá de que la mayoría podrá coincidir con que al equipo le faltó volumen de juego en la mayoría de los partidos.
Lo cierto es que desde la objetividad propiamente dicha, el accionar no deja margen para la duda. Hoy son 14 puntos los que separan a Central de Gimnasia, 12 los que los distancian de Patronato y Colón en lo que tiene que ver con el lote sobre el que se puede tener una referencia más clara. Son muchos más exiguos los 3 que hay con Banfield y la unidad de distancia sobre Newell’s (los santiagueños dividen por una sola temporada y Aldosivi, los dos también abajo, por dos).
Esa escalada en los promedios tuvo sus particularidades, que pueden analizarse de manera positiva en algunos casos y a la inversa en otros, pero la foto final es la que cuenta. A todas las dificultades que tuvo Central para imponerse en los mano a mano contra rivales directos les encontró una salida de escape frente a equipos. Sólo le ganó a Aldosivi, Gimnasia y Arsenal (además empató ante Patronato, Colón, Newell’s, Lanús, Central Córdoba y Banfield, y cayó contra Estudiantes y Argentinos Juniors), pero encontró saludables compensatorios ante equipos de otra talla como River y Boca.
Por eso, a la hora de calificar lo hecho hasta aquí, a Central se le adosan unos cuántos ítems desde lo netamente futbolístico, pero en el campo de lo numérico logró lo que hace más de ocho meses se propuso como único objetivo.
Preocupación de vitalicios
En medio de la preocupante crisis deportiva del equipo sabalero, con el tema del descenso, los llamados “Socios Vitalicios” del Club Atlético Colón emitieron un comunicado que expresa lo siguiente: “Preocupados por la actual situación Institucional y Deportiva por la que atraviesa nuestro querido Club, la Sub Comisión de Vitalicios se hace un deber impostergable manifestar nuestra honda preocupación, para lo cual, y a modo de colaboración proponemos unir todas las energías dejando de lado rencores y rivalidades que en nada conducen a mejorar la situación. El apoyo al plantel que defiende los colores del querido Club y a su nueva conducción técnica, habrá de ser incondicional. Sólo alentando y estimulando al ocasional grupo que salga a la cancha, se lograrán los efectos deseados. Los Socios y Simpatizantes saben del apoyo masivo, lo han demostrado una y mil veces en ocasión de gestas memorables y nosotros; los Vitalicios sabemos de ello porque nuestra antigüedad nos ha permitido vivir todas y cada una de ellas. Finalmente, no es tiempo de mezquindades y renunciamientos”, finaliza el comunicado.