Germán Viganotti
En una nueva presentación en el Ángel Malvicino, el “Tatengue” cayó como local 83 a 74 frente al último campeón de la categoría.
Germán Viganotti
Unión recibió este miércoles a Instituto de Córdoba, vigente monarca de la Liga Nacional de Básquet (LNB), que tuvo un brillante arranque que luego le sirvió para ir manejando con criterio el partido.
La “Gloria” llegaba con récord de 7-1 y liderando el torneo, mientras que el “Tatengue” estaba en la 18º colocación con récord de 1-2 y más de una semana de inactividad.
El santafesino Nicolás Copello fue el goleador del partido con 29 puntos para la visita, mientras que Nacho Alessio con 18 lo fue en el dueño de casa.
Con un buen marco de público que acompaño nuevamente al equipo de Ponce, el Tate salió a la cancha con el mismo quinteto que lo hizo en las últimas presentaciones, es decir Juan Pablo Cantero, Mateo Bolivar, Maximiliano Martín, Jeantal Cylla y Alessio; Instituto que venía de dos victorias consecutivas en la ruta, la última sobre Comunicaciones en Mercedes, Salió con Copello, Mateo Chiarini, Luciano Gonzalez, Nicolás Romano y Taya Gallizzi.
Tras el salto inicial la gloria tuvo un gran comienzo, con un Copello encendido que desde el sector izquierdo lastimó mucho y en los primeros cuatro minutos anotó 9 de los 14 puntos de su equipo. La visita solidificando su defensa lo mantuvo lejos al Tate que tuvo que apostar a los lanzamientos a distancia de Bolívar (2/2 en triples en el primer cuarto).
La salida de Copello y el ingreso del tucumano Vildoza le dio mayor un ataque más punzante y explosivo al equipo cordobés. Unión empezó a acortar distancias en el luminoso, aunque Instituto estuvo muy efectivo en ataque. Comenzaron a moverse las bancas en ambos equipos, a la cancha Godoy, Cabezas y Bertona en Unión.
El equipo mediterráneo con parcial de 8-0 desnudó demasiadas desatenciones en la defensa Tatengue, que con Bertona en cancha encontró mayor dinámica de futbol, el base con una bandeja cortó la sequía en conversiones del Rojiblanco. Tras el regreso a la cancha de Copello y otro triple a la carrera, le ventaja de la Gloria se estiró a 11 y obligó al minuto de Ponce.
Bertona continuó siendo la manija de su equipo para lastimar, aunque la visita prolongo el buen momento de sus individualidades con variantes para atacar y una efectividad de más del 70% en tiros de campo que fueron mucho para la retaguardia Tatengue.
Tras el primer descanso, Instituto regreso igual que al salir del primer cuarto, con el gran momento de Copello que además de ser la manija de su equipo, lastimó en cada bola que tuvo en sus manos.
Unión transitando un desconcierto defensivo, sin poder frenar los ataques rivales, confundido a la hora de salir con la pelota; debió nuevamente recurrir al tiempo muerto. Tras esto el Tate levantó, mejoró su defensa y poco a poco fue tomando las riendas del partido, mientras Copello continuó siendo un dolor de cabeza para la defensa Tatengue.
Se marcharon al descanso largo, con la sensación de que Unión había mejorado, aunque enfrente Instituto cada vez que atacó, lastimó y demostró porque es el último campeón.
De nuevo a las acciones, Unión apurado por anotar, cometió errores infantiles y le siguió costando anotar. Instituto criterioso para trasladar la bola jugando también con la impaciencia de unión para generar jugadas.
La primera mitad del tercer cuarto continuó con la Gloria siendo efectivo, el dueño de casa preso de los nervios se mostró por momentos poco resolutivo en el traslado y poca efectividad en el tablero rival. Tras otro sprint de la visita que estiró la diferencia a 20, la banca local solicitó minuto para ajustar varias cuestiones, sobre todo defensivas.
Unión salió a jugar mejor el segundo tiempo, por momentos pudo imponer la idea de juego que tiene Juanfra Ponce, y pese a perder el tercer cuarto; el último parcial fue del Tatengue.
El equipo mejoró, logró doblegar a un rival que está armado nuevamente para pelear arriba y que tiene muchísima jerarquía. Sobre el final para destacar el ingreso del cubano Pedro Bombino que con muchísimo amor propio fue artífice importante para la remontada final del equipo que en un momento estuvo muy cerca en el tanteador.
Síntesis
Los pibes tampoco pudieron ganar
En la noche del martes los chicos de la Liga de Desarrollo cayeron ante el mismo rival 81 a 69. Los dirigidos por Marcos Chechele venían de caer ante Independiente de Oliva en doble tiempo suplementario. Matías Reynoso con 20 puntos fue el máximo anotador Tatengue.