De la Redacción de El Litoral
Reabrió sus puertas tras cerrar por casi ocho meses, luego de un episodio que casi le cuesta la vida a un joven profesional.
De la Redacción de El Litoral
El accidente que sufrió en agosto un practicante de kinesiología, mientras prestaba servicio en el hospital provincial de rehabilitación “Carlos Vera Candioti” —Monseñor Zaspe 3738—, fue el puntapié para encarar toda una serie de trabajos de restauración del efector. Este lunes reabrió sus puertas y recobró el ritmo —el agitado ritmo—, tras permanecer casi ocho meses cerrado, aunque las intervenciones continuarán durante todo el año, según la directora del Vera Candioti, Liliana Revello.
Hasta acá, la remodelación y adquisición de equipamiento demandaron más de 5 millones de pesos.
Cerca de las 10, acurrucado en una sombra, un señor ofrece tentadores panes caseros en la puerta del hospital. Una ambulancia acerca un paciente y el personal del Vera Candioti atiende las demandas, que son muchas. En un pasillo, un electricista ordena cables desde lo alto de una escalera.
“La obra principal que se encaró, que es la reinstalación del circuito eléctrico, no se ve. Pero aprovechamos la ocasión para hacer albañilería y pintura en las áreas que priorizamos que son las que están dedicadas a la atención de pacientes: internación y los servicios terapéuticos”, precisó la directora durante una recorrida que realizó El Litoral.
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El comedor central del área de internación, luce notablemente diferente. El nuevo sistema eléctrico se instaló a la vista, la iluminación es moderna y efectiva. Todas obras que se llevan adelante en un edificio al que, a simple vista, le hacía falta mantenimiento ya que contiene una intensa actividad diaria y la construcción es muy antigua. Los pacientes que, mientras el hospital estuvo cerrado habían sido derivados a otros nosocomio para que continúen con los tratamientos, ya fueron reincorporados. Incluso los ocho que permanecieron internados, en el Hospital Sayago.
El detalle
El monto total de inversión para las refacciones edilicias, fue de $ 2.978.139. Consistieron en adecuar la instalación eléctrica del edificio, sectorizado por grado de consumo.
También ejecutaron obras complementarias como restauración de paredes, impermeabilizaciones, desagües, mejoras en carpinterías y pintura. Las áreas intervenidas fueron la nave central, cubierta, azotea, sótano, farmacia, talleres, internación, áreas comunes y de apoyo.
Asimismo, el monto invertido en la compra de equipamiento para el efector fue de $ 2.611.711. Incluyó la adquisición de insumos para terapia física e internación, sillas de ruedas, camillas, ropa de blanco, ventiladores y colchones. Próximamente, adquirirán una unidad de traslado.
Para más adelante
“Estamos retomando de a poco. Al edificio no lo podemos ampliar, pero sí mejoramos el estado de las áreas”, comentó Revello.
Para lo que resta del año —la directora no precisó fechas ni montos a invertir— está programado continuar con los trabajos de albañilería.
También modificarán el acceso al primer piso, que está destinado a servicios generales: un área de descanso, para trabajos de planificación y el área informática. Se van a restaurar los patios y las áreas administrativas, que no fueron una prioridad en esta etapa.
El área de hidroterapia, donde recibió la descarga eléctrica el practicante, permanece cerrada. Es que el objetivo es reconstruirla completamente “bajo conceptos modernos”.
Mientras tanto, el servicio se va a tercerizar mediante convenios con alguna institución, hasta tener ese sector nuevo. Esos trabajos también están programados para este año.
“Para los pacientes fue una alegría, una emoción muy grande poder volver. Por eso tratamos de hacer los espacios lo más amigable y amenos posible, para que se sientan cómodos”.
Liliana Revello,
Directora
230 empleados entre profesionales de las distintas especialidades y área administrativa, técnica e informática tiene el hospital.
32 camas para internación tiene el efector de las cuales están ocupadas ocho. En los próximos días ingresarán cuatro pacientes más para internación.
100 pacientes en total reciben tratamiento actualmente en el hospital, entre internados y ambulatorios, niños y adultos.