La barra brava de Racing y la de Deportivo Cali de Colombia protagonizan un conflicto que mantiene en vilo a las autoridades de Seguridad, a raíz del robo de una bandera del "Cilindro" de Avellaneda que desencadenó una emboscada a hinchas colombianos en la estación Gerli del tren Roca, donde al menos seis personas resultaron heridas, una de ellas de gravedad.
En la previa al partido entre la "Academia" y Melgar de Perú por la Copa Sudamericana, los barras del elenco colombiano se llevaron una bandera que estaba colgada en una de las tribunas del estadio del equipo argentino.
El caso fue judicializado por la propia barra de Racing, que se presentó en Avellaneda en la UFI 4 a cargo del doctor Mario Prieto para denunciar la sustracción y también en la Fiscalía Nacional número 8, con asiento en la Ciudad, donde el titular es Leonel Gómez Barbarella.
La situación decantó en represalias de la banda conocida como "Los Pibes de Racing", que amenazaron con presentarse en el banderazo que llevarán a cabo en el Obelisco los hinchas de Deportivo Cali en la antesala del duelo de mañana frente a Boca por Copa Libertadores, aunque el primer enfrentamiento se habría dado en Gerli.
Así, seis simpatizantes de Deportivo Cali fueron increpados "por un número indeterminado de personas”. Uno de ellos (identificado como Jeason Mendoza) se encuentra en grave estado y debió ser trasladado de urgencia al Sanatorio Finochietto, donde en este momento lucha por su vida.
"No les tenemos miedo. Nos vemos en el Obelisco, nos vemos en la Bombonera, nos vemos donde quieran. Estamos listos, estamos activos. Ya perdieron, locas", había respondido un presunto integrante del "Frente Radical Verdiblanco" en un audio que se hizo viral en las últimas horas, antes de los incidentes.
Por ese motivo, las autoridades de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires prepararon un operativo especial a la espera de posibles cruces en el Obelisco, donde la barra de Racing podría ir en busca de una nueva venganza.