El Índice Compuesto de la Actividad Económica de Santa Fe registró el febrero de este año una variación mensual negativa de 0,1% aunque la comparación interanual registró una suba del 1,6%. El acumulado 2022: -0,03%
En febrero de 2022 presentó una leve caída de -0.1%, transitando el 21avo mes de una fase expansiva, que no logra avanzar en el período de recuperación. Se debilitan los salarios y cae el consumo.
El Índice Compuesto de la Actividad Económica de Santa Fe registró el febrero de este año una variación mensual negativa de 0,1% aunque la comparación interanual registró una suba del 1,6%. El acumulado 2022: -0,03%
Así lo expone el nuevo informe del Centro de Estudios y Servicios de la Bolsa de Comercio de Santa Fe, que dirige Lucrecia D’Jorge y coordina Pedro Cohan. Destacan que ocho de las catorce series que representan la actividad económica de la provincia registraron variaciones mensuales positivas, aunque el resultado de febrero terminó levemente en rojo.
“La magnitud y persistencia de resultados desfavorables en algunas variables explican este resultado”.
Sobre los diez los subindicadores que crecieron, señala el CES que “la demanda laboral, medida por el índice de expectativas empresarias, que venía liderando la tabla de variaciones mensuales, registró una disminución del 6,7% con respecto a enero, aunque mantiene el crecimiento en relación a febrero de 2021 (23,1%).
“Los puestos de trabajo registrados (altas netas), en medio de un período de recuperación (incompleta), presentaron una variación mensual negativa del -0,2% en febrero de 2022. Por su parte, indican una mejora del 2,3% con respecto a igual período del año anterior”.
Siempre sobre el escenario de la ocupación en la provincia, señala el informe que “la inflación de febrero se sintió especialmente en el conjunto de remuneraciones reales de empleados registrados, la cual experimentó una disminución mensual del 2,3%. Si bien todavía se mantiene en terreno positivo en relación a igual mes del año pasado (4,3%), dicha tasa ha presentado una reducción importante, siendo que en enero se había ubicado en torno al 8,1%”.
En la contracara de los ingresos, los consumos también toman nota de las debilidades relativas que marca el informe. “Las ventas en supermercados (grandes superficies) volvieron a registrar una disminución mensual, en este caso del 0,3%, mientras que la caída interanual fue del 1,9%”.
El patentamiento de vehículos también marcó altibajos. “Se incrementó un 3,1% mensual en febrero, pero disminuyó un 5,6% con respecto a febrero de 2021”.
“Por su parte, la utilización de energía eléctrica industrial registró incrementos, mensual del 1,6% e interanual del 3,7%. Por el contrario, el gas industrial se volvió a contraer, un 1,1% con respecto a enero, y un 9,0% con respecto a febrero de 202”.
Sobre el consumo de hidrocarburos para la agroindustria y el transporte, señala el CES/BCSF que “también mejoró en febrero con un incremento mensual del 1,1%, y del 5,7% respecto al parámetro interanual”.
Agroindustrias y maquinaria
Sobre la molienda de oleaginosas “se registró un leve incremento mensual del 0,1%, pero se ubica casi al pie de la tabla de variaciones interanuales (-7,6% con relación a febrero de 2021). En lo que va de 2022 la serie muestra un comportamiento positivo pero muy leve, poniendo freno a la caída que mostraba desde marzo de 2021. Sin embargo, continúa muy por debajo del último pico (marzo de 2021)”.
Otra de las actividades emblemáticas de la economía santafesina, la producción láctea, “marcó una tasa mensual del 0,1% en febrero de 2002, mientras que el crecimiento interanual fue del 2,8%. A mediano plazo la serie se encuentra un 8,0% por encima del último pico (2018.02), pero todavía muy retrasada respecto a los máximos históricos”.
Por su parte la faena de ganado bovino y porcino experimentó un incremento mensual del 1,5%, “explicado por un incipiente crecimiento verificado en la categoría de bovinos. En este sentido la tasa interanual cortó con la racha de 17 tasas negativas consecutivas, marcando un valor de +2,5%. Cabe destacar que entre 2020 y 2021, la serie había acumulado una caída cercana al 18,5%”.
En cuanto a los “fierros” del campo que se fabrican en Santa Fe -la manufactura industrial que depende de la actividad primaria- señala el informe que “la producción de maquinaria agrícola presentó una disminución del -2,3% con respecto a enero de 2022. Luego de acercarse a máximos históricos, la serie muestra una evolución negativa en las últimas mediciones. En este marco, la tasa de variación interanual se redujo a 6,1%”.
Construcción
“El consumo de cemento registró una tasa mensual positiva en febrero del 2,5%, y esto le permitió marcar un incremento del 2,0% con respecto a igual período del año anterior. En el mediano plazo se observa un estancamiento de la tendencia desde 2007, con un pico histórico en enero de 2018. El nivel actual de la serie se encuentra todavía un 17,3% por debajo de dicho máximo”.
Impuestos
“La disponibilidad de recursos tributarios (en términos reales) por parte del estado provincial registró un leve incremento de 0,2%, y acumula un alza de 4,7% en los últimos doce meses. Los recursos provenientes de la coparticipación nacional de impuestos impulsan este incremento”.
La inflación en escena
“La variación interanual del índice coincidente de la provincia se ubicó en 1,6% en febrero de 2022, marcando una notoria desaceleración con respecto a la medición anterior (3,1%). En sentido inverso, el año comenzó con una importante aceleración de la inflación, sin dudas el problema que más obstaculiza la recuperación de la actividad económica a nivel local, y sobre el cual no hay indicios de moderación en el mediano plazo”.
Señala el documento del CES que “en cuanto a las variables más afectadas, el proceso inflacionario impacta significativamente en el poder adquisitivo de los ingresos familiares. Al respecto, si bien no se cuenta con datos particulares relativos a la provincia, el índice de salarios a nivel nacional indica que el escenario para el sector no registrado fue aún más desfavorable que en el sector formal.
“En sintonía con este contexto, el consumo, otro componente determinante en materia de ciclo económico, también mantiene una tendencia negativa. Por otro lado, continúa experimentándose cierta intermitencia en el comportamiento del conjunto de indicadores sectoriales, lo cual tampoco contribuye a consolidar un proceso de recuperación sólido”.
A nivel nacional “también se observa un amesetamiento de la recuperación, en un contexto internacional ciertamente ambiguo para la Argentina, que lamentablemente no contribuye a ordenar los serios desajustes macroeconómicos que se han intensificado en los últimos años”.