Redacción de El Litoral
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Télam
El juez Claudio Bonadío ordenó esta mañana media docena de allanamientos en la sede del club River Plate y la AFA, entre otros domicilios, en el marco de una causa en la que el ex presidente de la entidad, José María Aguilar, y otros dirigentes, fueron denunciados por presunta administración fraudulenta y supuesto “lavado de dinero”.
El magistrado dispuso que los procedimientos los realice la División Defraudaciones y Estafas de la Policía Federal e incluyen también allanamientos en las oficinas de Aguilar, del actual presidente, Daniel Pasarella, del ex dirigente Mario Israel y la empresa KPMG.
Con la intervención de la secretaria Laura Charnís y el fiscal Carlos Cearras, el juez ordenó las medidas en este expediente iniciado por una denuncia del abogado Alejandro Sánchez Kalbermatten, quien había aludido a irregularidades administrativas en el club de Núñez y presunto “lavado de dinero” (de ahí la competencia federal) en algunas transferencias.
Los procedimientos fueron pedidos por Sánchez Kalbermatten -quien también dijo haber representado a Diego Maradona, aunque el futbolista luego lo desmintió-, al ampliar una denuncia contra el titular de la AFA, Julio Grondona, y Aguilar por presuntas irregularidades en la venta de jugadores, “lavado de dinero” y en el financiamiento del programa “Fútbol para Todos”.
El abogado denunciante sostuvo que “durante el período de Aguilar existió un estrecho vínculo entre éste y Julio Humberto Grondona, titular de la AFA, permitiendo que el club Atlético River Plate fuera beneficiado económicamente con préstamos, anticipos a cuenta de televisión, y a cambio de esto Aguilar operó a favor de la continuidad de Grondona al frente de la AFA”.
Asimismo, agregó que en la venta de jugadores como Gonzalo Higuaín, Javier Mascherano, Javier Saviola, Pablo Aimar y Maximiliano López intervinieron “personas allegadas a Aguilar y Grondona, con lo cual el ingreso dinerario fue inferior al que hubiese correspondido”, configurándose un supuesto “lavado de dinero”, motivo por el cual la causa tramita en el fuero federal.
El denunciante afirmó también que Grondona “presionaba a Passarella para que no hiciera la famosa auditoría en contra de la administración Aguilar, para evitar ser investigado también él” y añadió que “de hecho hasta el día de la fecha, sigue sin aparecer la famoso auditoría KPMG”, cuya sede también ordenó allanar Bonadío.
En la acusación, el letrado agregó que Grondona “maneja los programas del Fútbol para Todos a su antojo y discrecionalmente, beneficiando a quienes pueden darle una seguridad o aporte y perjudicando a quien pudiera revelar detalles comprometedores que lo impliquen a él o a su socio Aguilar”.
Finalmente, Kalbermatten recordó que “hubo que investigar dónde se domiciliaba Aguilar para hacerle llegar las citaciones, porque el ex presidente pasa varios meses viviendo en Suiza”, debido a que integra la Comisión de Abogados de la Fifa.