Cuini Amelio Ortiz (desde Berlín)
El Festival de Cine de Berlín se desarrolla hasta el próximo 23 de febrero. Aquí una reseña de la rumana “Kontinental ‘25”, de Radu Jude, y la noruega “Dreams (Sex Love)”, de Dag Johan Haugerud.
Cuini Amelio Ortiz (desde Berlín)
En este séptimo día de la 75° edición del Festival de Cine de Berlín el director rumano Radu Jude presentó su nuevo trabajo “Kontinental ‘25”. Nos cuenta de Orsolya (Eszter Tompa) una agente judicial que lleva a cabo el desalojo del refugio de un hombre sin hogar, ni trabajo, ni esperanza. Tanto es así que el desalojado se suicida y Orsolya queda opresa por los cargos de culpa, aunque “legalmente no ha cometido ninguna falta”, como insiste en repetir a todos sus interlocutores. Es un drama salpicado con mucho humor, como ya conocemos de anteriores trabajos de Radu Jude, quien en la Berlinale del 2021 ganó el Oso de Oro con la tragicomedia “Bad Luck Banging or Loony Porn”.
“Kontinental ‘25” es una reflexión mordaz acerca de la economía post socialista, los nuevos nacionalismos y el lenguaje como símbolo de estatus social. Nadie entiende el dilema de Orsolya y eso la lleva a buscar con mas ahínco la aprobación de los demás. Nuevamente Radu Jude pone un espejo delante a la sociedad en la que vive, desnudando sus mezquindades, que de tan patéticas, nos arrancan una carcajada.
De Noruega llega “Dreams (Sex Love)” (Sueños (Sexo Amor)) con dirección de Dag Johan Haugerud. En una escuela de Oslo una adolescente de nombre Johanne (Ella Øverbye) se enamora perdidamente de su profesora de francés (Selome Emnetu). Para recordar siempre su estado de enamoramiento, la chica lleva al papel su experiencia. Por un lado su abuela, una poeta conocida y empedernida militante feminista percibe que la historia está muy bien escrita, por el otro lado su madre encuentra difícil leer las descripciones llenas de sensualidad de su hija, pero luego de una segunda lectura concuerda con la abuela que el racconto está muy bien escrito. ¿Cuánto hay de verdad y cuanto de fantasía en el texto? La lectura lleva a madre y abuela a reflexionar sobre sus propias vidas, las cosas que no hicieron y la añoranza de volver a sentir el enamoramiento adolescente. ¿Se debe publicar un libro así? ¿Quiere Johanne exponer su experiencia a un público de lectores? Otra de las protagonistas del film es la ciudad de Oslo, en toda su magnificencia y con todos sus contrastes. Mas no les puedo contar.
Quedan apenas dos días de festival hasta la entrega de premios. A mi me gustó “Blue Moon”, pero también los dos trabajos de Sudamérica: el brasilero “O ultimo Azul” y el argentino “El Mensaje”. Claro que los jurados son un libro sellado. Una vez más: dejémonos sorprender.
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