Después de la emotiva despedida de Denise Dumas en la recta final de la tercera temporada de Masterchef Celebrity, solo tres semifinalistas siguen en carrera: Tomás Fonzi, Mica Viciconte y Vicky Juariu Braier. Todo indicaba que la noche del miércoles habría un nuevo eliminado, pero Santiago del Moro les comunicó que nadie se iría a casa por esta vez, pero que el beneficio que ganarían sería crucial para la última gala de eliminación, que será el jueves. Sin embargo, las sorpresas no terminaron allí, porque minutos después ingresaron al estudio Joaquín Levinton, Mery del Cerro y Malena Guinzburg.
“Hoy vivirán una noche de déjà vu por los delantes grises y otro detalle más”, anunció Donato de Santis durante la misteriosa apertura. Se refería por supuesto a la presencia de los ex participantes, que se reencontrarían con sus estaciones de cocina. “Tendrán que trabajar en serie y hacer seis platos iguales del mismo menú, que van a elegir ustedes, y tendrán tres minutos de mercado para conseguir todos los ingredientes que necesiten”, les explicó Damián Betular.
Debido al desafío de cocinar en volumen, los expertos les anunciaron que no estarían solos en la compleja tarea. Los tres asistentes arribaron a pura sonrisa y trajeron además bandejas tapadas con mantas rojas, que contenían la respectiva proteína que le tocaría a su compañero de equipo. Al azar, cuando eligieron delantales descubrieron con quién iban a cocinar: Joaquín acompañó a Fonzi; Mery a Juariu; y Malena a Viciconte.
“Teníamos que volver”, sentenció Levinton, emocionado por el regreso y por ser el ayudante de Tomás en este tramo final. Luego se definieron los platos de cada dupla, y cada participante intentó conseguir toda la materia prima necesaria sin olvidarse de nada. La ex Combate preparó ceviche de salmón blanco, en base a experiencias anteriores donde tuvieron buenas devoluciones con mariscos y pescados. El actor hizo bifes de cordero con cuscús, y la influencer sorprendió con ancas de rana fritas.
Quien tuviera el mejor desempeño ganaría un beneficio para la última gala de eliminación del jueves, y esto aumentó la presión. Levinton y Guinzburg recurrieron al humor para descargar las tensiones de sus ex compañeros, y Del Cerro se mantuvo concentrada en todo momento. “Funciono mejor echada, es increíble”, bromeó la ex Casi Ángeles sobre su eximio desempeño como asistente. Al momento de la devolución los tres ex participantes se retiraron y dejaron a los semifinalistas con los seis platos terminados.
La primera en pasar fue Viciconte, que obtuvo muy buenos comentarios. Germán Martitegui resaltó la ejecución de todos los elementos, pero explicó la falta de algunos sabores icónicos: “Para mí la leche de tigre tiene un exceso de acidez, le faltaba un poco más de pescado, ajo, y jengibre, o algo más que le dé otra textura; igual es una sola crítica y muchos elogios”.
Cuando evaluaron el plato de Juariu, se sorprendieron con las ideas que aplicó, y aunque tuvo algunas fallas, brilló con su creatividad. “La capa de la fritura está perfecta, a mí me encanta. El yogur me gusta, el puré de zucchinis no es puré, hay algo que pasó en el medio, pero las ranas están sublimes”, opinó el pastelero del certamen. Por último, Fonzi no cosechó tantos halados, sino más bien correcciones: “Hay un problema de proporciones, está rústico y grotesco. Tiene sabores, pero me parece que es simplemente un buen intento”. Finalmente la influencer consiguió destacarse y obtuvo el enigmático beneficio que se develará la noche del jueves.