El chofer del ómnibus en el que murieron nueve alumnos y una profesora del colegio Ecos del barrio porteño de Villa Crespo en 2006 fue condenado a dos años y medio de prisión en suspenso, y quedó inhabilitado para conducir durante cinco años, dictaminó la Justicia de Santa Fe.
Además, deberá realizar “tareas comunitarias” durante más de dos años y medio, según el fallo del magistrado Jorge Fernández, a cargo de un Juzgado de Sentencia de la ciudad de Reconquista, en la causa por “homicidios culposos y lesiones culposas en concurso ideal”. Se trata de la tercera sentencia por este caso, ya que en primer término el imputado, Oscar Atamañuk, había sido absuelto por el juez Jorge Galbusera.
Ese fallo fue revocado en Cámara, la que remitió el expediente al magistrado Virgilio Palud, quien condenó al chofer del ómnibus a tres años de prisión en suspenso, además de aplicarle una inhabilitación para manejar durante siete años, si bien no indagó al imputado.
La sentencia fue declarada nula y el abogado de Atamañuk, Francisco Peralta, procuró lograr la prescripción de la causa. Ese intento fue rechazado por la Justicia y la causa quedó a cargo de Fernández, quien emitió la tercera sentencia, que permanecía este mediodía sujeta a la revisión de un tribunal superior.
El accidente ocurrió en la madrugada del 8 de octubre de 2006, cuando el ómnibus chocó de frente contra un camión en la ruta nacional 11, cerca de la localidad santafesina de Margarita, lo que le causó la muerte a nueve alumnos y a una docente del colegio secundario Ecos, además del deceso de los dos ocupantes del otro vehículo. Los estudiantes y la profesora regresaban de un viaje a Chaco, donde habían arribado con fines solidarios.