Estados Unidos vive por estos días un fuerte contraste entre sus costas, puntualmente en dos míticas ciudades que representan en una buena porción al país.
Mientras que en la costa Este se producen tormentas de nieve, en la Oeste sufren los embates del peor incendio forestal de los últimos tiempos, donde ya se contabilizaron 16 muertos.
Estados Unidos vive por estos días un fuerte contraste entre sus costas, puntualmente en dos míticas ciudades que representan en una buena porción al país.
Por un lado, las intensas nevadas de Nueva York y ciudades cercanas como Washington. Por otro, las temibles llamas que arrasan todo a su paso en Los Ángeles. La confrontación de los países está bien marcada y las imágenes que cada uno produce son espectaculares.
Mientras se espera una gran nevada para este domingo por la noche o lunes por la mañana, desde fines de diciembre las calles neoyorquinas ya lucen blancas.
No se sabe con exactitud cuánta nieve habrá, ya que todo depende de la trayectoria final de la tormenta. Sin embargo, el NWS (Servicio Meteorológico) colocó a gran parte de la región de Nueva York bajo alerta de tormenta invernal desde el domingo por la noche hasta el lunes por la mañana, momento en el que la nieve se empiece a acumular junto a fuertes vientos.
La tormenta está siendo causada por un vórtice polar, una banda de aire de baja presión en el Ártico. Comenzó en el centro de EE.UU. y se dirige hacia el este a lo largo de este domingo y lunes, según el NWS.
“Todas las miradas están puestas en el próximo sistema de tormentas invernales que llegará el lunes, por lo que hemos declarado un día de alerta meteorológica. La tormenta llegará en las primeras horas de la mañana del lunes y continuará hasta la tarde del lunes”, indica el servicio meteorológico.
La agencia advirtió sobre hielo, nieve y fuertes vientos en estados desde las Llanuras Centrales hasta el Atlántico medio “el lunes, con fuertes nevadas generalizadas y acumulaciones dañinas de hielo”. Se espera que la lluvia disminuya el martes por la mañana a medida que el sistema se mueva hacia la costa.
Al menos 16 personas han muerto por el fuego mientras miles de bomberos apuran su batalla contra la propagación de las llamas por todo el condado de Los Ángeles, el más poblado de Estados Unidos, dijeron hoy sábado las autoridades locales.
Según una lista de fallecidos publicada por el Médico Forense del condado de Los Ángeles, hasta la noche del sábado, el número confirmado de personas muertas en los incendios forestales ascendía a 16.
Once muertes se produjeron en el incendio de Eaton, mientras cinco se registraron en la zona del fuego de Palisades.
El fatal incendio en Eaton, que se desató la noche del martes, ha calcinado 14.117 acres (57,1 kilómetros cuadrados) cerca de Altadena y Pasadena. Hasta la tarde del sábado, las llamas estaban controladas al 15 por ciento.
El fuego seguía activo durante la noche en una zona inaccesible de pendiente empinada y vegetación extremadamente seca, informó el Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios de California (CAL FIRE, según su denominación en inglés), en una actualización sobre la situación.
La secuencia de imágenes aéreas muestra que aproximadamente 7.081 estructuras pueden haber sido dañadas o destruidas por el incendio.
El incendio de Palisades, el mayor de los al menos cinco incendios forestales activos en la región de Los Ángeles, ha quemado 22.660 acres (91,7 kilómetros cuadrados) y destruido más de 5.300 estructuras desde este pasado martes. Hasta ahora, se había controlado el 11 por ciento del incendio.
El gobernador de California, Gavin Newsom, dijo el sábado que está redoblando el despliegue de la Guardia Nacional californiana para contribuir a la extinción de los incendios. Y que se están destinando recursos públicos para combatir los incendios en Los Ángeles, con 1.680 guardias nacionales de California activos ahora mismo en la región.
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