El Litoral
El presidente francés, Emmanuel Macron, iniciará este jueves una inusual serie de intervenciones televisivas destinadas a frenar la caída de su popularidad y el incremento de la tensión social encarnada en las constantes huelgas de transportes que vive el país en los últimos días.
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Télam
A punto de cumplirse este 7 de mayo un año de su victoria electoral, Macron afronta paros regulares de trenes, aviones, universidades y en la justicia en contra de sus reformas, que según anunciaron los sindicatos se prolongarán varios meses y amenazan con crear un clima de oposición.
Con más de la mitad de opiniones contrarias a su acción, según dos sondeos publicados la semana pasada, el joven mandatario de 39 años registra una caída de su popularidad sobre todo entre los sectores más progresistas de la sociedad, lo que lo fue ubicando cada vez más a la derecha a los ojos de los franceses.
Aunque sin oposición parlamentaria, Macron busca revertir la tendencia opuesta a su gestión y organizó dos intervenciones televisivas de diferente cariz, cuidadosamente seleccionadas.
El jueves será entrevistado en el informativo de la televisión privada TF1, el programa más visto al mediodía, con un 40% de cuota de pantalla, sobre todo seguido en las zonas rurales del país y entre los mayores de 60 años.
Será la primera vez que Macron hable públicamente de las huelgas que, dos veces por semana, paralizan buena parte del transporte ferroviario del país en protesta por su proyecto de reforma de la empresa pública de trenes SNCF.
Para subrayar aun más el público al que se dirige, la entrevista tendrá lugar en la escuela de un pequeño pueblo normando de poco más de mil habitantes, Berd'huis, una forma de contrarrestar la imagen de presidente urbano que transmite, refirió la agencia de noticias EFE.
Fuentes cercanas al gobernante citadas por medios locales indican que Macron tratará de convencer a la Francia más rural de la necesidad de sus reformas y de que son los más afectados por las huelgas de ferroviarios.
Sólo se conoce un precedente de un presidente que eligiera acudir a un informativo del mediodía, el de Jacques Chirac en 1995.
Macron prefirió perder audiencia, ya que renuncia al "prime time" de la televisión, a cambio de dirigirse a la Francia más rural y a los jubilados.
El próximo domingo será entrevistado en la señal BFMTV y por el medio de investigación Mediapart en horario de máxima audiencia.
Esta nueva cita mediática tendrá un contendido más político y apuntará a un público más amplio.
Enfrente tendrá a dos reputados entrevistadores, Jean-Jacques Bourdin y Edwy Plenel.
Ante ellos, según esas fuentes, tratará de contrarrestar la imagen de que su política es de derechas, a la espera de que sus reformas comiencen a dar los resultados que el gobierno aguarda antes del segundo semestre.
Macron aseguró que no se prodigaría en los medios, pero en su primer año en el cargo concede entrevistas una vez cada trimestre.