El gobierno sueco aseguró que "nunca" extraditará a Julian Assange a un país donde se le pudiera imponer la pena de muerte, temor que denunció públicamente el fundador de Wikileaks si finalmente es enviado a Estados Unidos.
Lo afirmó la directora de Asuntos Penales y Cooperación Internacional del Ministerio de Justicia sueco, Cecilia Riddselius, en una entrevista concedida al diario alemán Frankfurter Rundschau.
No obstante, la funcionaria no descartó que la posibilidad de extraditar a Assange a Estados Unidos, siempre que la misma "esté sometida a estrictas condiciones", entre ellas que Washington garantice que el detenido nunca sería ejecutado.
"Jamás extraditaríamos a una persona amenazada con la pena de muerte", afirmó Riddselius al periódico alemán en su edición de hoy, según reproduce también la agencia de noticias DPA.
Suecia pidió a Reino Unido la extradición de Assange, quien fue denunciado por dos mujeres por delitos sexuales.
Sin embargo, el creador de Wikileaks asegura que todo forma parte de una estrategia para enviarlo a Estados Unidos, donde podría ser condenado a muerte por revelar decenas de miles de documentos secretos del gobierno en su plataforma de filtraciones online.
En la entrevista, la funcionaria sueca destaca que Estados Unidos no hizo hasta ahora gestión alguna para que su país le entregue a Assange. Tampoco Reino Unido ha recibido solicitud alguna de parte de Washington.
Assange se refugió en la embajada ecuatoriana en Londres y pidió asilo a Ecuador, que se lo concedió. Sin embargo, Reino Unido se niega a otorgarle un salvoconducto para que abandone el país e incluso amenazó con entrar por la fuerza en la sede diplomática para detenerlo, en base a una ley aprobada en 1987.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, advirtió al gobierno británico que cometería un "suicidio político" si hace efectiva esa "amanaza", ya que además Assange cuenta con asilo diplomático, dijo en una entrevista con la televisión Ecuador-TV.
Ecuador interpretó ese paso como "amenaza explícita" de las autoridades británicas, de la que Londres aún "no se ha retractado" ni "ha pedido disculpas", por lo que el peligro de que se haga realidad sigue existiendo, señaló Correa.
El mandatario aseguró también que está dispuesto a llevar el caso Assange ante el Consejo de Seguridad de la ONU u otros organismos internacionales y prometió más apoyo de la sesión extraordinaria de la Organización de Estados Americanos (OEA) prevista para este viernes.
"Si la OEA no tiene un pronunciamiento contundente, sería para preocuparnos muchísimo", consideró. Además, aseguró que el caso ha servido para aunar posturas de la comunidad latinoamericana.
Es que tanto los cancilleres de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) como los de la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), respaldaron este fin de semana a Ecuador ante las amenazas del Reino Unido y "repudiaron y condenaron" la actitud británica.
Fuente: Télam