Esos 75 días extras para solucionar la operación fueron brindados por Donald Trump, flamante presidente de Estados Unidos, en sus primeras horas de mandato. El documento, que salió en el marco de una ola de decretos presidenciales, le puso freno a la caída de la red social que duró poco menos de un día en suelo estadounidense.
La ley en cuestión obliga a que la plataforma más exitosa en los videos cortos sea vendida a un propietario no chino. Los principales argumentos recaen en un eventual “curado” de los contenidos por parte de ByteDance que podrían influir la opinión pública hacia una visión menos occidental y ante la posibilidad de acceso a datos sensibles de Estados Unidos por parte de China.
La novela que se extendió durante varios meses incluyó la visita del CEO de TikTok, Shou Zi Chew, al congreso del país norteamericano, donde la serie de consultas de los parlamentarias estadounidenses le terminó bajando el nivel a la discusión y se volvió un meme. Lo concreto es que la Administración Nacional de Radio y Televisión (NRTA), la Administración del Ciberespacio de China (CAC) y la Administración Estatal de Regulación del Mercado han interferido en contenidos de ByteDance en su principal producto y en otros secundarios.
A pesar de que el accionar de Trump representó un guiño para la firma y sus propietarios chinos, llegando a publicar en su cuenta de Truth Social “salven TikTok”, el magnate de la Casa Blanca ha visto una oportunidad de ganar por dos en una misma jugada.
El Fondo Soberano de Estados Unidos
El salvataje de TikTok en EE.UU., donde reside una de las principales comunidades de usuarios y creadores de contenido claves para la comunicación y la publicidad, podría llegar de la mano de la propia Casa Blanca.
Trump firmó este martes un decreto para la creación de un fondo soberano de riqueza, emulando a los países de medio oriente como Qatar o Arabia Saudita. El mismo mandatario insinuó que este sistema se utilizaría para comprar TikTok como inversión.
Sin mayores detalles dentro del documento oficial, el ahora dos veces presidente de EE.UU. instruyó a los Departamentos del Tesoro y de Comercio a presentar, en un plazo de 90 días, una estrategia para la creación del fondo. Scott Bessent, secretario del primero de dichos departamentos, manifestó: “Vamos a monetizar los activos del balance de EE.UU. en beneficio del pueblo. Habrá una combinación de activos líquidos y otros recursos dentro del país, los cuales trabajaremos para ponerlos a disposición de la ciudadanía".
Imagen ilustrativa. Crédito: Dado Ruvic/Reuters
Se concrete o no la hasta ahora no muy viable propuesta de Donald, el panorama de la plataforma y sus usuarios podría tomar un giro rotundo, incluso radicalizándose en otra dirección al tratarse de material indirectamente perteneciente a un gobierno en plena guerra económica-discursiva. Un remedio similar a la enfermedad.
Cuánto saldría TikTok
Las estimaciones brindadas por parte de analistas de Wedbush Securities y por las conversaciones extraoficiales de los involucrados en el conflicto, su valor rondaría entre los 40.000 y 50.000 millones de dólares. Elon Musk compró el ex Twitter por 44.000 millones de dólares.
Danza de nombres
Como si de un mercado de pases deportivo se hablará, la exitosa aplicación china posee una importante lista de candidatos a quedarse con el puesto de propietario.
Partiendo de propuestas concretas, insinuaciones o candidaturas desde terceros, gigantescas corporaciones y populares magnates tecnológicos se sumaron como posibles “salvadores”.
Imagen ilustrativa. Crédito: Mike Blake/Reuters
Los primeros tres, antes de que se profundizará la discusión, fueron Microsoft, Oracle y Walmart, quienes en 2020 sondearon TikTok. El primero de ellos parece haber vuelto a la subasta.
Otra empresa que pretende hacerse con la red social y brindarle un porcentaje al estado del país norteamericano es Perplexity AI, una startup china que cedería un 50% para un modelo de dirección mixta.
El director de Roblox, Jesse Tinsley, también figuró en las últimas semanas como un posible comprador de la marca más exitosa de las redes sociales en la última mitad de década.
Mr. Beast posee 356 millones de suscriptores en YouTube.
A este nombre propio de le suman el obviamente presente Elon Musk; Frank McCourt, ex propietario de un equipo de béisbol, que pretende alterar el curso de internet al devolverle el control de los datos a los usuarios; el exsecretario del Tesoro Steve Mnuchin, el exdirector ejecutivo de Activision Blizzard Bobby Kotick, el inversor Kevin O’Leary y el youtuber Mr. Beast.
Sea cual sea el destino que tome TikTok, parece verse obligado a comenzar a tomar decisiones antes del mes de abril, las cuáles no escaparán de entablar negociaciones con Washington.