En medio de un inconveniente apremiante como el cambio climático, se realizó una vez más la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Clima (COP26). Este año, presidentes de más de 100 países participaron de exposiciones, acuerdos y vínculos para frenar lo que ya es una amenaza para el planeta tierra.
Sin dudas que las causas del cambio climáticos son múltiples, pero a grandes rasgos hay cinco puntos que necesitan atención con urgencia: la combustión del carbón, el metano, la deforestación de los bosques, la cooperación económica con países en vías de desarrollo y el compromiso de Estados Unidos y China. Estos dos últimos países son las principales potencias económicas y a la vez los mayores contaminantes, por lo que deberán comprometerse aun más que los demás para conseguir un resultado favorable en los próximos años.
Sin embargo, las medidas que cada nación adoptó no son legalmente vinculantes. ¿Qué quiere decir esto? Los países no están obligados jurídicamente a cumplirlas, por lo que el mundo verdaderamente se pregunta si los presidentes cumplirán con lo prometido o todo quedará en la diplomacia de los discursos.