Una multitudinaria movilización se convocó este miércoles en Plaza de Mayo para apoyar al gobierno de Alberto Fernández, en el marco del Día de la Militancia, fecha que recuerda el regreso del exilio de Juan Domingo Perón, en 1972.
Una multitudinaria movilización acompañó al gobierno Nacional en el día que recuerda la vuelta del exilio de Perón. Desde la CGT, organizaciones sociales hasta dirigentes del peronismo llegaron desde distintos puntos del país. La Cámpora se concentró en el Obelisco y fue a la plaza tras el discurso presidencial.
Una multitudinaria movilización se convocó este miércoles en Plaza de Mayo para apoyar al gobierno de Alberto Fernández, en el marco del Día de la Militancia, fecha que recuerda el regreso del exilio de Juan Domingo Perón, en 1972.
Desde el mediodía empezaron a llegar -con bombos y banderas- las primeras columnas de militantes representando a diversos movimientos sociales alineados con el peronismo, sindicatos, entre ellos la CGT y Camioneros. También llegaron militantes autoconvocados y dirigentes peronistas.
"Venimos a la plaza para apoyar al proyecto nacional y popular, en contra del macrismo que nos endeudó y para frenar a la derecha para que el peronismo siga siendo la fuerza y el movimiento que defiende a los trabajadores", destacó a El Litoral, Lucía Baez, secretaria de Igualdad de UPCN Mercado Central.
El aire viciado era producto de la mezcla del humo de las parrillas que estaban diseminadas a granel ofreciendo "choris", hamburguesas y bondiolas. Otros humos eran los producidos por las bengalas y bombas de estruendo que los militantes arrojaban mientras se escuchaban los cánticos a favor del peronismo y acordándose del ex presidente Macri.
Mientras corrían las horas y se acercaban las 17 (horario en el que el presidente dio su discurso) estratégicamente cada organización fue ganando la Plaza de Mayo y se empezó a ubicar en cada "parcela" para mostrar así su acompañamiento a la gestión de Fernández. Además de las insignias de cada agrupación, los rostros de Perón y Evita flamearon en cada rincón de la plaza, y casi en igual número aparecían las imágenes de Néstor y Cristina Kirchner. El "Fuerza Alberto" también tenía su espacio en banderas de palo que flameaban en lo alto.
La multitud presente, las estimaciones de los organizadores la ubicaron en unas 100 mil personas, estalló cuando sonó la marcha peronista minutos antes de que Alberto Fernández saltase al escenario a dar la cara tras el duro revés que significaron las elecciones para su gobierno. "Este es el proyecto de país que defendemos, por eso queremos que le vaya bien a Alberto", coincidieron miembros de Barrios de Pie, ante la consulta de este medio.
Fernández fue el único orador de la tarde. Durante su discurso, que duró poco más de 15 minutos, agradeció el multitudinario apoyo que se reflejó en aplausos y cánticos desde cada columna social y política que se hizo presente en la tarde primaveral porteña (Ver aparte).
De esta manera, y ante los momentos de incertidumbre y fragilidad que atraviesa el gobierno nacional, el Día de la Militancia fue la excusa perfecta para mostrarle a propios y extraños que el acompañamiento popular sigue presente.