El aumento del 3,6% que registró el PBI en el primer trimestre de 2018 frente a un bajo nivel del año anterior no tuvo la entidad suficiente como para provocar una apreciable mejora en las condiciones de contratación de personal en el mercado de trabajo.
"Los resultados del primer trimestre de 2018 correspondientes al total de aglomerados urbanos muestran que la tasa de actividad fue del 46,7%, la tasa de empleo es del 42,4% y la tasa de desocupación alcanzó al 9,1%. Estos resultados representan un aumento significativo en la tasa de desocupación con relación al trimestre anterior, mientras que las tasas de actividad y empleo no presentan diferencias estadísticamente significativas", informó el Indec.
Si bien resalta el organismo que "que los resultados del primer trimestre pueden estar afectados por factores estacionales, es relevante destacar la comparación con el mismo trimestre del año anterior. Se puede observar un incremento significativo de las tasas de actividad y empleo. Por su parte, no se registran cambios significativos en la tasa de desocupación con respecto al primer trimestre del año 2017".
De ahí que si bien el mercado encontró respuesta para absorber el incremento de la oferta de trabajadores, no tuvo la fuerza suficiente para avanzar en la reducción del porcentaje de desocupados, los cuales se incrementaron en cantidad de personas sin empleo.