A sala llena, la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe) despidió el 2021 en Rosario, con un brindis que contó con la presencia del histórico dirigente fabril José Ignacio De Mendiguren, quien presentó un libro a 20 años del fin de la convertibilidad. El sector cierra un año cuyo nivel de actividad superó las cifras de los últimos tres períodos: hasta octubre la producción estaba 2,4% por encima de 2019 y 6,9% respecto de octubre de 2018.
El acto tuvo lugar este lunes en la Asociación Empresaria de Rosario y contó con la presencia de las principales autoridades de la entidad, entre ellos su titular Víctor Sarmiento, su secretario Walter Andreozzi y su director ejecutivo Esteban Moine. En el estrado, junto a De Mendiguren se sentó el presidente de Unión Industrial Región Rosario Guillermo Moretti.
Según las cifras que expuso Fisfe, la industria se consolidó este año como puntal de la recuperación económica, que se sintió a nivel nacional pero particularmente en Santa Fe, donde el sector tiene una incidencia central. Ello es notorio por ejemplo en materia de empleo, donde mientras que a nivel provincial el incremento del empleo privado fue del 3,4%, la industria mostró un crecimiento del 4,8% interanual. Las fábricas aportaron 5.800 de los 17.000 nuevos puestos de trabajo.
"El empleo industrial se recupera en Santa Fe desde el último trimestre de 2020 y actualmente genera el 25% del total de las actividades del sector privado", subraya el último informe de la entidad, en el que también se subraya que "al interior se destaca el desempeño del complejo metalúrgico, la industria siderúrgica, alimentos, muebles y caucho y plásticos".
La siguiente infografía expone los resultados interanuales de las principales ramas de la actividad fabril durante octubre de 2021, último período con datos consolidados:
Otro dato sobresaliente está relacionado con el valor de las exportaciones de origen agropecuario e industrial, que se incrementaron 64% y 92%, respectivamente, en relación al mismo período del año anterior. "El valor estimado para el año 2021 de las exportaciones santafesinas de productos manufacturados, tanto de origen industrial como agropecuario, se encuentra claramente por encima de los últimos cinco años", se pronosticó desde Fisfe.
Durante la actividad se realizó un brindis que operó como cierre de año, en el que participaron además un grupo de funcionarios provinciales, entre los que se encontraron los ministros de Producción, Trabajo y Ambiente Daniel Costamagna, Juan Manuel Pusieri y Erika Gonnet, respectivamente. También dio el presente el secretario de Producción local Sebastián Chale.
Un libro a 20 años del 2001
Antes del momento de las copas tuvo lugar la presentación del libro "2001- 2021, La historia no contada de la gran crisis", en el que De Mendiguren repasa, entre anécdotas y análisis, lo sucedido por aquellos días trágicos, en los que era titular de la Unión Industrial Argentina. Durante su alocución, que se extendió durante más de una hora, el veterano dirigente llamó a sus colegas a recrear el consenso logrado sobre el fin de la convertibilidad, que permitió al sector imponer su agenda para "sentar las bases del período de crecimiento más largo del país".
"Me pone muy contento estar en Santa Fe, lugar en el que empezamos a trabajar 20 años atrás en ese movimiento que nos permitió enfrentar a los bancos, a las privatizadas, cuando tuvimos éxito en instalar un modelo productivo", dijo en diálogo con la prensa, cuando también agregó que "el libro pretende transmitir cómo actuaban los distintos actores nacionales ante la crisis".
El actual presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (Bice) repasó como en los meses previos a la salida de De La Rúa se formó un consenso hacia dentro del sector, en el que también participaron trabajadores y la iglesia, entre otros. En la actualidad, según consideró el dirigente, esa comunión "no pasa". Por ello, exhortó a "poner en agenda lo importante, una tarea que nos corresponde a nosotros, los industriales".
Por último, De Mendiguren aprovechó la oportunidad para expresar su opinión sobre la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI): "Estoy convencido, por un tema de sentido común, que habrá un arreglo", consideró, para luego decir que el entendimiento deberá contar con "un tiempo" para que la economía pueda recuperarse.