María Eugenia "China" Suárez estaría considerando mudarse a Turquía para acompañar a su pareja, Mauro Icardi, quien se encuentra en proceso de rehabilitación tras una cirugía de rodilla.
Esta decisión generó tensiones con los padres de sus hijos. Según trascendió, Suárez habría propuesto acuerdos para llevarse a sus hijos Magnolia, Amancio y Rufina, pero ambos actores mostraron su rechazo. Vicuña estaría preocupado por la estabilidad y educación de los más pequeños, mientras que Cabré se opone a la idea de que Rufina abandone Argentina.
María Eugenia "China" Suárez estaría considerando mudarse a Turquía para acompañar a su pareja, Mauro Icardi, quien se encuentra en proceso de rehabilitación tras una cirugía de rodilla.
Esta decisión surge luego de que el Galatasaray, equipo en el que juega el futbolista, le solicitara regresar a Estambul para supervisar su recuperación, advirtiendo que podría rescindir su contrato si no cumple con esta exigencia.
El tema fue abordado públicamente, y según trascendió, Suárez ya habría iniciado conversaciones con los padres de sus hijos para gestionar la logística de esta posible mudanza.
En el caso de sus hijos Magnolia y Amancio, fruto de su relación con Benjamín Vicuña, se habría planteado una propuesta económica como parte de las negociaciones.
Según se supo, Suárez habría ofrecido una cuota alimentaria mensual de 4.000 dólares a cambio de poder mudarse con los pequeños a Turquía. Sin embargo, Vicuña no estaría de acuerdo con esta idea, argumentando la importancia de la estabilidad y educación de los niños en su entorno actual.
Por otro lado, se habría mencionado un esquema de tiempo compartido, donde ambos padres pasarían 15 días al mes con los niños, algo que también generaría complicaciones logísticas, considerando que Vicuña tiene compromisos laborales en Madrid por los próximos meses.
En cuanto a Rufina, la hija que Suárez comparte con Nicolás Cabré, trascendió que el actor tampoco estaría de acuerdo con la idea de que su hija se traslade a Turquía. Según fuentes cercanas, Cabré preferiría mantener a Rufina en Argentina, asegurando la continuidad de su educación y rutina.
El debate pone en evidencia los desafíos que enfrentan las familias ensambladas al momento de tomar decisiones importantes, especialmente cuando se trata de mudanzas internacionales que involucran a menores.
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