El Colegio de Jueces de Segunda Instancia de Santa Fe revocó la sentencia condenatoria para un policía de la ciudad de Recreo, que tres meses atrás fue condenado a 8 años y medio de prisión, más inhabilitación absoluta, por el delito de robo calificado. Se trata de Daniel Gustavo Marcelo Odetti (38) -también investigado por confabulación para el tráfico de drogas-, quien recuperó la libertad los primeros días de septiembre, tras notificarse de la absolución.
El 2 de septiembre los camaristas Enrique Álvarez, Martha Feijoó y Fernando Gentile Bersano resolvieron "revocar la sentencia apelada y, en consecuencia, absolver de culpa y cargo a Odetti (...) en virtud del principio in dubio pro reo". Asimismo, se ordenó "la libertad para el encausado".
El revés judicial ataca la sentencia del 11 de junio de 2021, donde un tribunal de primera instancia, compuesto por los jueces Rosana Carrara, Nicolás Falkenberg y Héctor Gabriel Candioti lo condenaron "como coautor del delito de robo calificado por uso de arma de fuego, agravado por ser integrante de fuerzas de seguridad", por un hecho ocurrido en la ciudad de Recreo, el 9 de febrero de 2019.
El 19 de agosto último se celebró la audiencia de apelación, de la que participaron, además del tribunal de Cámara, los abogados particulares de Odetti, Claudio Torres del Sel y Natalia Giordano; y los fiscales de la Unidad de Delitos Complejos del MPA, Ezequiel Hernández y Mariela Jiménez.
En alzada, la defensa repasó los hechos por los cuales Odetti llegó a juicio, circunscriptos al robo de $ 4.000 de la billetera de un muchacho, al que el policía -de civil-, junto a Martín Maximiliano Pagani -prófugo de la justicia provincial y federal- persiguieron en auto y obligaron a frenar en el cruce de las rutas 11 y 70. Lo apuntaron con un arma, lo golpearon, insultaron y amenazaron en plena vía pública, delante de las cámaras de seguridad y testigos.
"No se ha probado bajo ningún punto de vista que Odetti le haya sustraído dinero a G., amén que hay serias fallas en el procedimiento", reconoció Torres del Sel en su descargo defensivo. Hizo referencia a un "audio que su pupilo realiza al 911" al que consideró "vital para la resolución de la causa". Y refiere a la presencia de "testigos que dan cuenta de la maniobra peligrosa de G. y ante ello la actitud de su cliente tratando que detenga la marcha para evitar males mayores".
Por su parte, la fiscalía solicita se confirme la sentencia, en tanto los hechos están filmados por las cámaras de seguridad, y no pueden ser controvertidos.
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Tras escuchar a las partes, el camarista Álvarez fue quien tuvo a su cargo el primer voto, al que adhirieron sus pares Feijoó y Gentile Bersano. El magistrado sostuvo que fiscalía y defensa coinciden en que hubo una persecución, con exhibición del arma en horas tempranas de la mañana. La discusión surge en cambio, cuando la víctima denuncia que ambos le sustrajeron $ 4.000.
No se encuentra controvertido que "existió una persecución", dice Álvarez, "aunque las partes discrepan en cuanto a los motivos por los cuales el imputado pretendía la detención del Renault Clío" (para la fiscalía era por un robo, mientras para la defensa era por una pelea de tránsito).
"Tampoco están en discusión los momentos posteriores a que ambos vehículos se detienen" y tras la golpiza, Odetti y Pagani revisan y abollan el coche, hasta que otro policía interviene "al ver el ataque desmesurado".
Luego el procedimiento se traslada a la Comisaría 16° de Recreo, donde los oficiales de guardia "manifiestan que Odetti tenía aliento etílico y una conducta agresiva hacía todo el personal".
A pesar del derrotero, el juez pone de resalto que "la única conducta delictiva que se debe probar y por la que fue traído a juicio Daniel Odetti es el robo de cuatro mil pesos a G.", cuando en realidad "observo claramente que ha cometido varias conductas delictivas".
El Dr. Álvarez destacó además que el acusado "es un funcionario policial, que circulaba no sólo alcoholizado sino que además había ingerido sustancias tóxicas (cocaína), tal cual se desprende de los diversos análisis científicos. Esto es sólo una muestra de la situación personal lamentable en la que se encontraba Odetti".
"Se demostró con los videos que le pasa su arma de fuego reglamentaria al acompañante -Pagani- que es un civil (quien hoy se encuentra prófugo)", lo cual también constituye delito. A lo que agregó "la conducción peligrosa", seguida de la agresión, insultos y golpes a la persona y su vehículo, lo cual lo coloca "muy rápidamente, ante los delitos de agresión, lesiones leves, amenazas, coacciones y daño".
"También encontramos abuso de autoridad y obstrucción a un funcionario público", cuando intentó agredir a los oficiales puesto que quería realizar el sumario.
"Rápidamente tenemos más de siete tipos penales de los que Odetti claramente es responsable, no sólo por los videos, testimoniales sino por algunos tramos de su propia declaración", resume el juez y lamenta que "todo lo antes mencionado, nada tiene que ver con la plataforma fáctica que desarrolla la Fiscalía".
Allí surge "la pregunta y centro neurálgico del tema a debatir: ¿Cometió Daniel Odetti el delito de robo?". Para los camaristas, ésto no pudo acreditarse debidamente y ante la duda, decidieron absolverlo.
Básicamente existe un amplio margen de tiempo entre su traslado a sede policial para declarar -horas tempranas de la mañana- y el momento en que se da cuenta del faltante de dinero -a las 16.10 cuando le toman otra declaración-.
Además, el tribunal hace un simple cálculo a partir del 6 de febrero, cuando la víctima retira $ 3.000 de un cajero, a lo que se suman $ 1.000 que le da su padre y luego le deduce los gastos que realiza los días subsiguientes.
"Si se probó que tenía cuatro mil pesos tres días antes del hecho, más luego vive, come, bebe, carga nafta, paga entrada a boliches, se divierte en dos boliches y luego sigue teniendo el mismo dinero, es evidente que estamos ante un economista brillante a quienes muchos estudiosos del tema le tendrían envidia. Esto es inexplicable", escribe Álvarez con tono irónico.
En definitiva, para el camarista "todo el incidente se debió a un problema de tránsito y la actitud agresiva de Odetti fue producto de ello". "Obviamente es muy raro que se trate de un robo a plena luz del día (era verano) y un lugar tan transitado. Es raro, aunque posible, pero dadas las características es muy poco probable". Es decir que "respecto al robo del dinero hay más dudas que evidencias", por ende, "de la lectura de la sentencia condenatoria, se advierte que no se ha alcanzado el grado de certeza apodíctica que un acto de esa naturaleza requiere".
Mientras la Justicia provincial llevó a Daniel Odetti a juicio este año por un supuesto robo por el cual resultó absuelto en segunda instancia, la Justicia Federal lo investigaba por confabulación para el tráfico de estupefacientes agravado por su condición de policía.
Luego de ser procesado, el 16 de junio el fiscal federal Nº 2, Walter Rodríguez, solicitó un requerimiento de elevación a juicio por haber intentado montar una cocina para pasta base y cocaína que, al parecer, fracasó en el intento. Las evidencias surgieron del secuestro de dos teléfonos cuando lo detuvieron el 9 de febrero de 2019.
Aunque se analizaron conversaciones y mensajes durante un breve lapso, se descubrió que Odetti estaba incursionando en la cocina de pasta base y cocaína, en su doble rol de producción y consumo.