Cuando faltaban unos pocos minutos para la medianoche la policía fue alertada sobre un motociclista que se encontraba caído sobre la Avda. de Circunvalación Oeste, a la altura de Iturraspe.
Cuando faltaban unos pocos minutos para la medianoche la policía fue alertada sobre un motociclista que se encontraba caído sobre la Avda. de Circunvalación Oeste, a la altura de Iturraspe.
Con esos datos una comisión de uniformados partió hacia el lugar, en la creencia de estar ante un posible motoderrape o algún otro incidente vial.
En efecto, en el citado sector, yacía tendido sobre el pavimento un hombre que tenía colocado un casco, y a unos pocos metros había una moto caída.
Pero segundos después de examinar el cuerpo surgió una sorpresa macabra.
El infortunado presentaba un impacto de bala que había ingresado a la altura de la nuca y que tenía orificio de salida por la frente.
Como es de rigor la novedad fue comunicada al fiscal en turno quien ordenó que de inmediato personal de la división Homicidios de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) tome cartas en el asunto.
Entre las primeras acciones los pesquisas estudiaron los registros fílmicos de las cámaras de seguridad que hay en la zona.
Según trascendió en esas imágenes se ve el paso de la víctima, a bordo de una motocicleta, y llevando consigo un bolso.
Este último elemento (el bolso) no fue hallado en la escena del hecho, lo que hace suponer que el infortunado haya sido blanco de un feroz asalto.
Lo acontecido fue el cierre de un verdadero “lunes negro”.
Apenas una horas antes de este hecho, otro hombre fue hallado sin vida en la zona rural de Santo Tomé.
El cuerpo presentaba varios impactos de bala y se encontraba en avanzado estado de descomposición.