Un hombre quedó en prisión preventiva luego de haber agredido a su pareja en San Jorge.
La agresión ocurrió la noche del 9 de febrero después de una cena familiar, durante una discusión en la que la violencia escaló rápidamente. El hombre de 33 años permanecerá tras las rejas.
Un hombre quedó en prisión preventiva luego de haber agredido a su pareja en San Jorge.
La decisión judicial fue tomada luego de una audiencia llevada a cabo en los tribunales de la mencionada ciudad, en la que el juez Pablo Ruiz Staiger dispuso la medida cautelar solicitada por el fiscal Carlos Zoppegni.
El acusado, identificado por las iniciales FEM, enfrenta graves cargos por agredir y amenazar a su pareja, en un contexto de violencia machista.
El fiscal Zoppegni, quien lleva adelante la investigación, detalló que el imputado cuenta con antecedentes penales por violencia de género, lo que fue tenido en cuenta por el juez a la hora de resolver la prisión preventiva.
“Aunque la defensa del acusado propuso otras alternativas, el magistrado rechazó dichas propuestas y resolvió que permaneciera en prisión preventiva”, expresó el fiscal.
Según el relato del fiscal, el pasado domingo 9 de febrero, durante las primeras horas de la mañana, el imputado agredió físicamente a su pareja en la vereda de una vivienda en el barrio Guadalupe, de San Jorge. La discusión que desembocó en la violencia ocurrió después de una cena en la que también participó el padre de la víctima.
En medio de la discusión, FEM mordió a la mujer en el brazo, lo que provocó un forcejeo entre ambos. El altercado culminó con ambos en el suelo, momento en el que el acusado tomó violentamente a la mujer por el cabello, la levantó y la obligó a subirse a una motocicleta.
Durante el traslado, la víctima sufrió una quemadura en su pierna derecha al rozar el caño de escape del vehículo.
El fiscal también hizo hincapié en un patrón de comportamientos previos por parte del imputado. Desde noviembre del año pasado, FEM habría amenazado de muerte a la mujer en reiteradas ocasiones para amedrentarla y evitar que denunciara los abusos.
Estas amenazas forman parte de un contexto más amplio de control y violencia ejercida por el acusado.
“El imputado ejerció violencia de género de manera sistemática, aprovechándose de su posición de poder dentro de la relación de pareja”, explicó Zoppegni, quien enfatizó que la actitud del acusado refleja un claro desdén por la dignidad de la víctima, a quien sometió por el solo hecho de ser mujer.
El hombre enfrenta cargos por “lesiones leves dolosas agravadas, dado que las agresiones fueron cometidas contra una persona con la que mantenía una relación de pareja y en un contexto de violencia de género”. Además, le atribuyeron “amenazas coactivas”.
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