En la presentación, Olivera subrayó la importancia de contar con 600 millones de pesos más en el presupuesto educativo, cifra que -según sus cálculos- podría ahorrarse de bajar el ausentismo en la escuela pública a porcentajes similares a la escuela de gestión privada.
“Si este dinero se destinara al presupuesto educativo podríamos construir 3.000 viviendas para docentes de 200.000 pesos cada una; o bien construir 100 escuelas de más de 5 millones de pesos o destinar 150.000 pesos para equipamiento, capacitación docente o becas para alumnos en cada uno de los establecimientos educativos”, explicó.