El Litoral / Telam
Paula Perassi (34) desapareció en 2011. Se cree que fue sometida contra su voluntad a un aborto, lo que le provocó la muerte. Su cuerpo nunca apareció.
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El fiscal del juicio por el aborto seguido de muerte de Paula Perassi (34), ocurrido en la ciudad santafesina de San Lorenzo en 2011 y cuyo cuerpo nunca fue encontrado, adelantó este mediodía el pedido de prisión perpetua para los cuatro principales acusados, y penas de entre 6 y 16 años para los cinco policías que investigaron el caso.
En apertura de juicio oral y público, el fiscal Donato Trotta acusó a Gabriel Strumia, a su esposa Roxana Michl, a su empleado Antonio Díaz y a la partera Mirta Ruñisky por la desaparición de la mujer y el aborto sin consentimiento seguido de muerte, por lo que pidió que ellos sean condenados a la pena de prisión perpetua.
El alegato de apertura fiscal se desarrolló esta mañana en el Centro de Justicia Penal de Rosario, donde pidió además que se condene a la pena de 16 años de prisión a los ex policías que investigaron el caso (Jorge Krenz, Gabriel Godoy, Aldo Gómez y María José Galtelli), a quienes acusó de encubrimiento agravado, falsedad ideológica y destrucción de pruebas.
Finalmente, solicitó la pena de seis años de prisión por encubrimiento para el ex jefe policial de la localidad de San Lorenzo, Adolfo Puyol.
“UN PLAN MACABRO Y SIN ESCRÚPULOS”
En su alegato ante los jueces Griselda Strologo, Mariel Minetti y Álvaro Campos, el fiscal Trotta sostuvo que tanto los civiles involucrados como los policías coincidieron en ejecutar, "un plan sin escrúpulos, engañoso y macabro que será probado a lo largo del juicio". "Vamos a demostrar que la impunidad tiene un límite", aseguró el representante del Ministerio Público, al sostener que ese plan no hubiese sido posible sin la participación de altos jefes policiales.
Según lo ventilado hoy por la parte acusadora, la víctima Paula Perassi (34) salió de su casa en la localidad de San Lorenzo, situada a 27 kilómetros de Rosario, cerca de las 22 del domingo 18 de septiembre de 2011, una hora y media después de recibir un llamado telefónico desde una cabina de un telecentro con el pretexto de ir a buscar la tarea para uno de sus dos hijos. La teoría del fiscal es que esa llamada la realizó el acusado Strumia, quien mantenía una relación extramatrimonial con Perassi, para obligarla a salir de su casa.
Según la pesquisa, Paula cursaba un embarazo de seis semanas de Strumia y había decidido tenerlo. "En cambio a Strumia se le complicaban las cosas en su casa" y junto a sus cómplices, entre ellos su mano derecha y chofer, Antonio Díaz, "la metieron en un auto y la llevaron de manera forzada a la casa de la falsa partera, Mirtha Ruñisky, en la localidad de Timbúes, donde se le practicó un aborto forzado que terminó con su muerte", consideró el fiscal.
El cuerpo de Perassi nunca apareció y, según el fiscal, "Strumia necesitó de los contactos que tenía con los jefes policiales de San Lorenzo a los que conocía y con quienes mantenía relaciones comerciales".
“UN COLECTIVO CRIMINAL”
Por su parte, en su alegato de apertura, la querella representada por los letrados Adrián Ruiz y José Ferrara acusó a los imputados de conformar "un colectivo criminal que tenía la intencionalidad de practicar un aborto". Ruíz coincidió con el pedido de pena del fiscal respecto a los principales imputados y solicitó que el ex jefe de policía, Puyol, también sea condenado a prisión perpetua, ya que "no puede quedar únicamente con el delito de encubrimiento -como lo pidió el fiscal- y debe ser juzgado como partícipe primario".
Por su parte, los abogados defensores de Strumia, su esposa, su chofer y la partera, coincidieron en rechazar la teoría de la fiscalía, al sostener que en la causa "hay solo pruebas de dichos de otras personas. Solamente hay indicios".
Fuentes judiciales aseguraron que el debate tiene prevista la declaración de 180 testigos y se prevé que las audiencias se extiendan hasta finales de abril. La jornada de hoy contó con la presencia en la puerta de los tribunales locales de decenas de mujeres que llegaron con pancartas para exigir "Justicia por Paula".