El Litoral
Fue asistido en el Cullen por una herida. Luego tomó un taxi, amenazó con un arma al chofer y se hizo llevar hasta Colastiné. Le robó y escapó junto a un cómplice.
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Un joven de 27 años ingresó este jueves a las 22.20 al hospital José María Cullen con una herida producto de un disparo en la pantorrilla izquieda. Su lesión no revestía gravedad por lo que tras ser asistido fue dado de alta.
Al ser entrevistado por personal policial explicó que fue atacado por personas que no conoce en la zona de la calle Nuestra Señora de Guadalupe y la Vía Muerta.
Tras ser dado de alta del hospital y junto a un cómplice abordó el interno 273 -un Fiat Siena- de la empresa Sociedad Radiotaxi. Le apuntaron al chofer (de 33 años) con un arma y lo obligaron a llevarlos hasta el mismo lugar donde el joven había sido herido horas antes.
Llegaron al lugar y obligaron al taxista a bajarse del vehículo. Le robaron la billetera, $ 800, el celular, una campera y un chaleco. Para amedrentarlo dispararon con el arma contra el suelo.
El caso tuvo una derivación que resta aclarar. Según relataron voceros policiales, el taxista llegó a ver dónde buscaron refugio los delincuentes que le robaron.
Al lugar llegó poco después una dotación policial que entrevistó a una mujer quien dijo ser la madre de un joven que respondía a las características aportadas por el taxista. Las fuentes consultadas relataron que la mujer aseguró que su hijo "estaba durmiendo" y les negó el acceso al lugar.
Ante la negativa de la mujer los pesquisas iniciaron gestiones para obtener una orden de allanamiento ante el fiscal de turno, aseguraron voceros de la policía local, pero el funcionario resolvió que "al no ser suficientes las pruebas no se proceda de forma alguna".
Horas después desde el Comando Radioeléctrico ampliaron en detalles los datos sobre la persona sospechada y con esa información el fiscal Sergio Elvira libró un pedido de captura. Por el momento los pesquisas no han dado con su paradero.