El rincón donde nuestros lectores expresan sus ideas, inquietudes y opiniones sobre los temas que nos atraviesan. Este es tu espacio para hacerte escuchar.
Marta Snaidero
Hace días que la EPE tiene a los residentes de Sauce Viejo bajo la presión de temer que se quemen artefactos, tirar alimentos perecederos, soportar calores extremos, que se desinflen los colchones antiescaras, verse privados de la alimentación a través de sonda nasogástrica, o que les falte un vital elemento como el agua si depende de energía para el bombeador/bomba.
A esto hay que sumarle depósitos de sanitarios vacíos, o el peligro latente de la presencia de alacranes, ante la imposibilidad de verlos en la noche; inutilidad de alarmas domiciliarias (ideal para que se produzcan robos); no poder filtrar las piletas, o el perjuicio total para comercios que venden alimentos que necesitan de cadena de frío.
Cualquier actividad que se lleve a cabo mediante la provisión de energía eléctrica se ve afectada, desde el uso de la plancha para la ropa o de otros artefactos con encendido eléctrico, hasta la carga de la baterías de los celulares y la falta de tono en los teléfonos fijos, siendo todo este contexto un obstáculo para la atención de enfermos en los centros de salud (y etc., etc., etc.).
Años atrás, El Litoral se hizo eco de reclamos de vecinos de los que participé, a la altura de la ruta 11 y Austria. Con esta actitud por un tiempo terminaron los cortes.
No "cortamos" ruta. Debería repetirse para que una empresa que factura lo que quiere y no hace mantenimiento, invierta como corresponde en resolverle la vida a usuarios a los que por su exclusiva culpa perjudica patrimonial y psicofísicamente. Inútil es quejarse o reclamar a las autoridades vecinales o municipales.
No tienen el poder, ni les corresponde intervenir, aunque en conjunto suelen -en algunos sitios- podar ramas que crecen entre el cableado, lo que es meritorio (repito, en algunos lados).
De nada sirve comunicarse vía telefónica a Reclamos, se escuchará la limitada y repetida excusa: "Su domicilio se encuentra afectado por una falla en el cableado de media tensión". Una grabación dio por tierra la atención humana que antaño supo tener la oficina de Sauce Viejo, cuando voluntariosos empleados acudían ante un desperfecto.
Empresas del Estado o privatizadas da igual; cuando sus responsables solo ocupan cargos para lograr muy buenos sueldos o ser el trampolín para llegar a otros, nunca serán eficientes.
Eduardo Aparo
No suelo enviar comentarios de ningún tipo, pero esta vez quisiera dar mi opinión en relación al importe de la boleta de la EPE que me llegó, la del primer bimestre de este año.
Si bien el consumo en ese periodo fue elevado, debido a las altas temperaturas que sufrimos, me pareció una cifra exagerada, por lo que recurrí a revisar cuánto era el importe del mismo bimestre del año pasado, el consumo era similar (1.116 KW contra 1.119), pero al comparar los montos comprobé que el aumento era del 500 %: $ 23.585 el año pasado contra $ 146.327 de este año (por cuota).
Entonces pensé… ¿Qué rubro tuvo tanto aumento en un año? Y no, no existe ningún rubro, costo de vida, etc., etc., que haya aumentado tanto. Compruebo con tristeza que los santafesinos estamos anestesiados, porque no escuché a nadie que protestara por esto y es como que acá no pasó nada.
Pero a mí me gustaría saber a qué se debe un aumento tan elevado para un artículo de primera necesidad, aunque no tengo la esperanza de que alguien conteste.
Lidia de Av. Caputto
Semanas atrás entraron a robar en cuatro casas de Av. Caputo al 3500. En una robaron una batidora, una cafetera… a la mía entraron pero no robaron nada, aunque se ve que revisaron todo. Llamé a la policía.
La policía vino y se los señalamos, porque son dos "trapitos" que están sentados enfrente. ¿Saben qué nos dijeron? "¿Ustedes qué pruebas tienen que son ellos?" Pero si están todos el día sentados viendo cuándo entramos y cuándo salimos.
¿Quién otros van a ser? En mi casa dejaron un cuchillo, quiere decir que si yo llego en el momento en el que ellos están adentro me acuchillan. ¿Tiene que morirse alguno? ¿El intendente en serio no puede hacer nada por un poco más de seguridad de los ciudadanos?
En otra de las casas dejaron un cuchillo roto en la cerradura, porque tratan de entrar de esa forma. Eso quiere decir, repito, que si uno sale al patio o al jardín en ese momento lo acuchillan.
Es una vergüenza. Por favor, que alguien tome nota. La policía nos dice que si los meten presos, en veinticuatro horas el juez les da la orden para que los larguemos. ¿Pero dónde estamos viviendo? No se aguanta más semejante inseguridad. Muchísimas gracias por el espacio.
Roberto Rubén Sánchez
El 24 de febrero de 2022, bajo el nombre de "Operación Militar Especial", Rusia comenzaba su invasión a Ucrania, dando inicio de esa forma a la guerra más sangrienta de los últimos años, con un total estimado hasta ahora de un millón de víctimas.
El 18 de febrero de 2025 se reunieron en Riad, Arabia Saudita, las delegaciones de Estados Unidos y Rusia, para iniciar las conversaciones sobre cómo poner fin a la guerra en Ucrania pero sin que el presidente Volodímir Zelenski estuviese presente.
De esto se deduce que el imprevisible Donald Trump pateó el tablero de la OTAN y, desalineándose de Zelenski, propone que los territorios conquistados queden en poder del Kremlin.
En buen romance: a Estados Unidos le importa un bledo la guerra y los muertos del invadido, haciendo caso omiso a la posición de los países europeos. Su política es convenir con los rusos antes que lo hagan los chinos, para quitarle poder a la virtual alianza geopolítica entre Rusia y China.
Es una mala decisión del país elegido como nuestro "modelo" a seguir, que parece que -además- restablecería alianzas con Venezuela. Nosotros… ¿Estaremos seguros ante estas nuevas decisiones de un Trump tan cambiante y ciclotímico?
En cuanto a la Argentina, la recurrencia de los hechos delictivos a diario hace pensar en un plan de amedrentamiento y sometimiento de la sociedad al terror, a punto que todos estamos perturbados por los hechos acaecidos más las noticias que difunden los medios generando paranoias aún en nuestro propio hogar.
Tenemos miedo de las "entraderas" cuando llegamos o salimos, también lo tenemos al querer descansar cosa que es imposible ya que hay que levantarse a menudo a revisar la casa. Salir o entrar con el automóvil se convirtió en una odisea, nos arrebataron la calle, ellos pueden circular nosotros después que cae el sol no sabemos quién es quién.
En mi opinión mientras los políticos juegan al Don Pirulero, que la ministra Patricia Bullrich más que ocuparse de la campaña tome una medida militarizando las calles, ya estamos en peligro.
Así no se puede vivir, sino atemorizados a que los delincuentes decidan en este día cargarse a alguien más. No importa de quién es la culpa; lo que importa es actuar y pedir justicia. La única estadística valedera es que son uno o dos crímenes por día: una verdadera ruleta.
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